Cables de internet submarinos

Imagina una tela invisible que envuelve al mundo, conectando continentes, países y personas en un vasto océano de información. Esta tela está formada por los cables submarinos de internet, un verdadero sistema nervioso que sostiene la era digital. Cada clic, cada mensaje, cada vídeo que envías o recibes viaja a través de estos cables, sumergiéndose en las profundidades del océano antes de emerger al otro lado del mundo.

Recientemente, los intrépidos exploradores del canal What's Inside se aventuraron en un viaje para desentrañar los misterios de estos cables. Con la ayuda de los youtubers del canal Nat and Friends, se embarcaron en una expedición para revelar lo que se esconde bajo las olas. ¿El destino? Un muelle donde un barco estaba siendo cargado para instalar un nuevo cable submarino, estableciendo una conexión vital entre Estados Unidos y Brasil.

Lo que encontraron fue fascinante. Los cables submarinos son verdaderas obras de ingeniería, diseñados para soportar las presiones extremas del fondo del mar. Cada cable está compuesto por múltiples capas de protección, desde polietileno hasta cables de acero trenzados, que garantizan su resistencia estructural. En su interior, los hilos de fibra óptica relucen, transmitiendo datos a velocidades impresionantes.

Pero la jornada no se detuvo ahí. Con herramientas en mano, los exploradores cortaron uno de estos cables, revelando sus secretos internos. Lo que encontraron fue una intrincada red de protecciones y conductores, cada uno desempeñando un papel crucial en la transmisión de datos por el océano. Descubrieron hilos de cobre, responsables de alimentar a los repetidores instalados a lo largo del cable, garantizando que la señal permanezca fuerte durante todo el viaje.

Este cable en particular forma parte de un ambicioso proyecto de interconexión entre Brasil y Estados Unidos, una colaboración entre Algar Telecom, Google y otras empresas. A través de él, Santos y Fortaleza serán unidos a Boca Ratón, Florida, creando una nueva ruta para el intercambio de datos entre continentes.

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